Broodbroeders & Awardt

¿Por qué no regalar un aromático pan especiado de Broodbroeders?

Desde hace 10 años, Broodbroeders elabora panes artesanos con masa madre de Malinas. A sus clientes incondicionales no les importa esperar un poco más en la cola para llevarse también cruasanes y pasteles de chocolate. Ahora han elaborado específicamente para «Mmm... Malinas» un pan especiado que hunde sus raíces en el Renacimiento: lleva pera, sirope de manzana y pera y una mezcla secreta de hierbas. Además, con una edición especial para llevar un regalo a alguien.

Margarita de Austria hizo que Malinas se convirtiera en el epicentro de todas las novedades a principios del siglo XVI. 12 creadores de sabor de Malinas han elaborado delicias actuales con ingredientes nuevos y clásicos de antaño.

Broodbroeders & Awardt

Hierbas en el pan especiado, como se hacía en el Renacimiento

Steven Van der Stichelen: «Para elaborar un pan especiado clásico, hace falta harina, miel y hierbas. Para la mezcla de especias empleamos únicamente hierbas que ya se conocían en el Renacimiento. Semillas de hinojo procedentes de esta zona, además de canela, jengibre y clavo, que llegaron a nuestro país a través del puerto de Amberes. En nuestro pan especiado no saboreará miel, sino un delicioso sirope de manzana y pera. Se trata de una opción que probablemente no se les ocurriera en la Edad Media, pero que hoy tiene todo el sentido teniendo en cuenta los problemas que tienen las abejas».

Torta de San Rumoldo

En la corte de Saboya de Margarita de Austria ya comían también pan especiado. Solo que aquel pan especiado no se parecía mucho al que tenemos hoy en día. El pan especiado con miel era más duro, estaba adornado de una manera festiva y solía adoptar bonitas formas. Se entregaba como obsequio, para poner en la habitación como un adorno fragante y únicamente después ya se consumía. Por este motivo, Broodbroeders ha preparado dos versiones para usted: una torta dulce y más tierna y un auténtico pan de celebración con la forma de la torre de San Rumoldo.

Un guiño al cuero dorado de Malinas

Steven Van der Stichelen: «Lo que queremos es hacer que la torta de celebración se convierta en una auténtica obra de arte, perfecta como regalo. Para ello trabajamos con Awardt, colaborando con la red de artesanos de la baja Edad Media de la ciudad. Els producen etiquetas que, al terminar el pan, se pueden utilizar como llaveros. Un homenaje a Malinas como centro de la producción de cuero dorado de la época».

«En la época de Margarita de Austria, había recetas y libros de cocina, aunque eran para los más acaudalados y para ocasiones especiales. Si queremos saber que comía la gente normal, lo mejor es mirar bajo tierra. En los vertederos y pozos negros, como los de los albergues, se encuentran restos de cereales, verduras, hierbas, fruta, carne y pescado. Si mezclamos esta información con las estaciones y con las técnicas gastronómicas de aquellos tiempos, nos haremos una composición de lugar acertada de lo que se servía en la mesa. Tanto en la corte como en las casas del pueblo llano».

 

Jeroen Van Vaerenbergh, De Foodarcheoloog (el arqueólogo de los alimentos)


Panadería artesanal con masa madre

Steven Van der Stichelen: «Broodbroeders aboga por la calidad antes que por la cantidad. Aún seguimos amasando de forma manual. Y no empleamos levadura industrial para que leve nuestro pan, sino un producto natural, la masa madre. El motivo es que cuanto más tarde en levar la masa, más se mezclan los sabores y más completo y rico será el pan al final. Ahora hay panaderías con masa madre en cada esquina, pero hace 10 años nosotros fuimos pioneros».

«El cariño con que elaboramos nuestro producto se aprecia en todo lo que hacemos. Así, trabajamos con un molinero de Sint-Joris-Weert que prefiere moler lentamente antes que moler más. Distribuimos en bicicleta el pan a nuestros puntos de recogida. Además, somos la única panadería que funciona con suscripciones de pan, para restringir la cantidad de excedentes. Todos y cada uno de los nuevos productos que desarrollamos va en consonancia con este filosofía».

La torre de San Rumoldo

Steven Van der Stichelen: «Me gusta irme de viaje, pero también volver a casa. Y el primer punto que se reconoce es la torre de San Rumoldo. En cuanto la veo, ya sé que estoy en casa. También es un punto de referencia cuando paseo en bici por la ciudad».

Acerca de Mmm... Malinas

Mmm... Malinas es una ruta gastronómica que recorre la ciudad, por 10 restauradores de Malinas, donde podrá degustar los platos del siglo de oro borgoñón, el siglo XVI. Conozca las otras nueve delicatessen en www.visitmechelen.be/mmm-malinas.